EL MOMENTO DEL DIA
Oswaldo Sánchez: el equipo le muestra sus respetos. El guardameta mexicano había regresado a Alemania la víspera del partido, tras asistir al funeral de su padre, quien tenía previsto viajar a Europa para ver jugar a su hijo, que no pudo debutar en las dos Copas Mundiales de la FIFA anteriores.
Antes de que comenzase el encuentro, Sánchez elevó los brazos y la mirada hacia el cielo, y cuando sonó el pitido final sus compañeros lo rodearon, en un emotivo momento. Millones de espectadores neutrales que contemplaron la escena desde todos los rincones del mundo se habrán sentido hinchas de México tan sólo en solidaridad con él. Sánchez recibió una alegría en el minuto 76, cuando el arquero iraní, Ebrahim Mirzapour, y Rahman Rezaei encadenaron sendos fallos que permitieron a Bravo hacer el segundo de su cuenta particular.
El otro momento del día se vivió en el último partido de la jornda. ¿El contexto? Portugal subyugó a Angola durante más de cuatrocientos años, hasta que el dominio colonial llegó a su fin en 1975. El estreno del país africano en la Copa Mundial de la FIFA era pues un momento histórico y de gran carga emocional, algo para el eterno recuerdo de un pueblo asolado por el hambre y la guerra. El primer minuto no fue alentador para los debutantes, ya que Pauleta se escapó y pudo haber marcado. Sin embargo, el máximo anotador portugués de la competición preliminar no esperaría más de tres minutos para hacer su primera diana en la Copa Mundial de la FIFA. Un rejuvenecido
Figo superó por velocidad a Jamba y cedió hacia atrás para que Pauleta empujase. Pese a todo, el equipo dirigido ahora por el brasileño Luiz Felipe Scolari, cuya última participación en el torneo se saldó con la conquista del título en 2002, no lo pasó nada bien a continuación. Una vez más, los recién llegados rayaron a gran altura.
Antes de que comenzase el encuentro, Sánchez elevó los brazos y la mirada hacia el cielo, y cuando sonó el pitido final sus compañeros lo rodearon, en un emotivo momento. Millones de espectadores neutrales que contemplaron la escena desde todos los rincones del mundo se habrán sentido hinchas de México tan sólo en solidaridad con él. Sánchez recibió una alegría en el minuto 76, cuando el arquero iraní, Ebrahim Mirzapour, y Rahman Rezaei encadenaron sendos fallos que permitieron a Bravo hacer el segundo de su cuenta particular.
El otro momento del día se vivió en el último partido de la jornda. ¿El contexto? Portugal subyugó a Angola durante más de cuatrocientos años, hasta que el dominio colonial llegó a su fin en 1975. El estreno del país africano en la Copa Mundial de la FIFA era pues un momento histórico y de gran carga emocional, algo para el eterno recuerdo de un pueblo asolado por el hambre y la guerra. El primer minuto no fue alentador para los debutantes, ya que Pauleta se escapó y pudo haber marcado. Sin embargo, el máximo anotador portugués de la competición preliminar no esperaría más de tres minutos para hacer su primera diana en la Copa Mundial de la FIFA. Un rejuvenecido
Figo superó por velocidad a Jamba y cedió hacia atrás para que Pauleta empujase. Pese a todo, el equipo dirigido ahora por el brasileño Luiz Felipe Scolari, cuya última participación en el torneo se saldó con la conquista del título en 2002, no lo pasó nada bien a continuación. Una vez más, los recién llegados rayaron a gran altura.
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